«Vino el gerente y nos avisó con lágrimas en los ojos», contó un ex trabajador. La empresa indumentaria que funcionaba en el Parque Industrial de Santa Rosa echó a todos los trabajadores y cerró sus persianas.
La empresa en el año 2015 tenía 400 trabajadores. En al año 2017 esa cantidad bajó a 200. Hoy solo quedaban 130 y esta mañana fueron despedidos.
Uno de ellos es Luis, un jujeño que hace30 años que llegó a Santa Rosa, hoy lo echaron y se vuelve a su lugar de origen. «Me voy con la frente en alto. Hace 29 años que todos los días hago el mismo camino, de mi casa a la fábrica. Esta es mi segunda casa. A fin de año pensaba ir a visitar a los míos, ahora los llamé para avisarles que me volvía», contó resignado y concluyó con voz entrecortada: «Este es el día más triste de mi vida».