En una conmovedora protesta frente a la sede de la Dirección de Niñez y Adolescencia en Santa Rosa, la familia González exigió respuestas sobre el paradero de su bebé de siete meses, alegando que fue separada del núcleo familiar sin motivo aparente y sin una orden judicial.

Tres generaciones de la familia, residentes del barrio Fonavi 42, se unieron en una manifestación ruidosa para reclamar por Aitana Catalenya, la hija de Florencia Antonela González, una adolescente de 18 años que dio a luz el 30 de marzo en el hospital Lucio Molas. Sosteniendo pancartas improvisadas, exigieron respuestas y cortaron la calle, incluso intentaron entrar por la fuerza al edificio, lo que provocó la intervención del Grupo Especial de la Policía (GEP) para evitar disturbios mayores.
El bisabuelo de la bebé, Antonio González, declaró: «Cuando la bebé nació, ya intentaron separarla, alegando que mi nieta era menor de edad». Agregó que «hace tres meses citaron a mi nieta en la calle Güemes, y cuando ella se presentó, le quitaron a su hija. Mi esposa, que la acompañaba, trató de evitarlo y varios policías la sacaron, arrastrándola hasta la vereda».
Los familiares afirman que «hay personas que intentan vender a nuestra bebé a una familia interesada en adoptarla» y subrayaron que «no había motivo alguno para separarla de su madre».
