Tres residentes de Santa Rosa fueron interceptados y demorados por caza furtiva en los terrenos rurales de Chapalcó, al oeste de Toay. La acción tuvo lugar tras una búsqueda que se extendió por aproximadamente una hora en los campos cercanos, y durante la misma se encontraron dos especímenes sin vida: un ciervo macho destinado a la reproducción en un coto de caza -valuado en alrededor de 1.500 dólares- y una cierva hembra.
El incidente se desencadenó alrededor de las 7:40 de la mañana, cuando tres individuos fueron avistados cerca del coto de caza «El Chillen», en la zona rural de Chapalcó. Al percatarse de que habían sido descubiertos, abordaron una camioneta Ecosport y emprendieron la huida por un camino vecinal en dirección sur hacia la Ruta Provincial 11.
Ante esta situación, se activó un operativo que involucró a personal de Seguridad Rural, el Destacamento Naicó y la comisaría de Quehué. También se informó al personal del Puesto Caminero Quehue UR-III. Aproximadamente a las 8:40 de la mañana, se logró identificar y detener a los tres cazadores, en cuya posesión se encontraron los dos ciervos sin vida, un macho y una hembra.
«Estas personas estaban violando disposiciones de Recursos Naturales de la Provincia (Ley 1194), por lo que se les labró un acta de infracción», indicó una fuente policial.
Además, se inició un procedimiento penal por infracción a la Ley Nacional N° 22421, con la participación de la Fiscalía de Delitos contra la Propiedad y Juicios Directos, ya que el ciervo macho presentaba una perforación en una de sus orejas.
Este ciervo estaba identificado con una caravana específica, como parte del sistema de identificación de los animales en el coto «El Chillén». Posteriormente, se halló dicha caravana, junto con restos de vísceras, en el mismo lugar del coto donde se avistó la EcoSport y a los tres hombres. El ciervo macho, de alto valor genético, tiene un precio de mercado de 1.500 dólares, según confirmaron las mismas fuentes policiales. Estos animales están destinados a la reproducción y son dóciles.
Aunque se confiscaron balas, miras y una linterna, no se encontró el arma que se presume fue utilizada en la caza.
«Uno de los involucrados tiene un hermano en Naicó. Pasa por ahí y salen a hacer macanas. El dueño del vehículo (de apellido Heick) se identificó como ‘empleado del Gobierno’, sacando chapa», precisaron las mismas fuentes. Los policías igual iniciaron todo el procedimiento.


