Rubén Colado, flamante intendente de la localidad de Puelén, se mostró preocupado por la deuda del municipio, que rondaría los cinco millones de pesos. Además, detalló que recibió un parque automotor en malas condiciones. A pesar de ello, el nuevo jefe comunal se mostró optimista en cuanto a generar mejoras en el pueblo.
Colado asumió prácticamente solo ya que el jefe comunal saliente, Carlos Llanos, no asistió a la jura. Primero habían acordado hacerla en el SUM de la localidad pero luego Llanos la suspendió porque no estaba inaugurado. Sin embargo, días antes de irse inauguró el salón en soledad y no hubo más contacto con su sucesor.
Pero ese ya no es un problema porque el intendente no tiene certeza alguna de los números del municipio, a pesar de haber estado trabajando hasta la madrugada misma de la asunción del martes pasado.
“El municipio les debe los haberes a los empleados municipales y varios meses a la planta política”, dijo Colado en diálogo con Radio Municipal AM 900 de 25 de Mayo.
Las expectativas estaban centradas en que regularizaría la deuda al personal apenas asumiera. Sin embargo, Colado desestimó que pueda hacerlo de inmediato y no pudo precisar un plazo en el que tanto los concejales y el intendente salientes como el personal municipal puedan ver saldadas las deudas que la comuna mantiene con ellos.
Rubén Colado agregó que “el parque automotor está en muy malas condiciones y en general todo lo que depende del municipio fue decayendo durante la gestión del jefe comunal anterior”.